Síntomas físicos de la ansiedad en la garganta
En el caso de algunas personas, los signos físicos de la ansiedad se concentran en la zona de la garganta. Estos síntomas acaban provocando una sensación de asfixia muy desagradable. Los más comunes que puedes sufrir son los siguientes.
Nudo en la garganta
Muchas personas describen los síntomas de la ansiedad o del estrés elevado como un nudo en la garganta. En este caso, sienten dificultad para tragar y molestias, lo que acaba acarreando un aumento en los niveles de ansiedad, ya que sienten miedo al no poder respirar de manera fluida.
Sensación de flema
La sensación de flema es muy similar a sentir un nudo en la garganta. Aquí, se trata de un globo faríngeo, que muchas personas describen como tener un objeto atorado en la garganta o como una sensación de algo que raspa, pincha o tensa. Esto hace que la garganta se note parcialmente bloqueada y puede dar la sensación de ahogo, que aumenta todavía más la ansiedad.
Sin embargo, la sensación de flema o globo faríngeo no interfiere realmente con la respiración o la deglución, aunque puede llegar a ser bastante molesto.
Garganta seca
Otro de los síntomas físicos de la ansiedad es la garganta o boca seca. Es una situación muy desagradable, ya que en la boca se tiene una sensación similar a si estuvieras haciendo ejercicio intenso sin ningún tipo de hidratación.
Por eso, se recomienda que, cuando se está pasando por una situación de ansiedad o estrés, se beba mucha agua, para mantener la boca y la garganta bien hidratadas. Por otro lado, sería importante visitar un psicólogo especialista en ansiedad.
Dolores musculares horribles por ansiedad
Los dolores musculares y la tensión muscular son un signo físico de ansiedad muy frecuente y que puede acabar influyendo drásticamente en la vida de quienes los padecen.
Si una persona sufre estrés o ansiedad durante un periodo de tiempo largo, implica que el organismo produzca citocinas de forma continuada. Las citocinas son un tipo de moléculas que, entre otras funciones, regulan la inmunidad y la inflamación. También afectan al crecimiento de las células sanguíneas que ayudan a la respuesta inmune e inflamatoria del cuerpo. Con todo esto, un exceso de citocinas provoca un agarrotamiento muscular y dolores musculares de diferentes niveles.
Por otro lado, la ansiedad también puede causar dolores musculares a causa de las situaciones estresantes, ya que estas hacen que tensemos los músculos sin que nos demos cuenta y acumulemos mucha tensión en zonas como los hombros, el cuello, la espalda o, incluso, las piernas.
Quemazón en las piernas por ansiedad
Tener la sensación de quemazón en las piernas por ansiedad también es habitual. Este sentimiento se conoce también como sensación de ardor y se puede sentir como calor, punzadas y piquetazos o, incluso, como un dolor agudo y punzante.
Los problemas dermatológicos en las piernas y en cualquier parte del cuerpo que provocan picor o quemazón, conocido como prurito, suelen estar relacionados con el estrés en la mayoría de los casos.
Cuando se dan episodios de tristeza, agobio, nerviosismo, tensión o depresión, la piel puede que envíe señales a su manera para alertar de la situación y, en algunos casos, se manifiesta con estos picores o sensaciones de quemazón. Se la conoce como dermatitis atópica y suelen ser episodios puntuales y benignos. Aún así, no hay que ignorarlos y hay que controlarlos para que no lleguen a agravarse o, incluso, cronificarse.
Sensaciones raras por ansiedad
Aunque los síntomas más comunes de la ansiedad son bastante conocidos (sensación de ahogo, dolores musculares, sentimiento de miedo y de pérdida de control, etc), hay algunos que no lo son tanto, que son sensaciones bastante raras, y que pueden hacer que este trastorno pase desapercibido en ciertas personas.
En muchos casos, son sensaciones raras por ansiedad que no sabríamos relacionarlas con este trastorno a simple vista. Por ejemplo, tener un sabor amargo o metálico en la boca, afecciones en la piel, problemas gastrointestinales, falta de concentración, comportamientos compulsivos, pesadillas recurrentes, caída del cabello, tinnitus o bostezar más de la cuenta, entre otros.
Si notas alguno de estos síntomas o tienes sensaciones raras y notas que algo no está bien, acude a un especialista para que pueda revisar tu situación y pueda ayudarte a identificar el problema.
Síntomas físicos de la ansiedad en mujeres
Todo el mundo puede sufrir ansiedad, independientemente de cuál sea el género. Además, los síntomas son los mismos tanto para mujeres como para hombres, ya que las diferencias se dan más entre personas individuales que dependiendo del género.
Ahora bien, es cierto que las mujeres tienen el doble de posibilidades de sufrir depresión o un trastorno de ansiedad que los hombres. Esto se debe a que el trastorno de ansiedad está relacionado con las variaciones de los niveles de estrógenos durante el ciclo menstrual y la vida reproductiva de la mujer.
En el caso de las mujeres embarazadas, la ansiedad varía más notablemente, tanto durante el embarazo como después. Por lo tanto, hay que estar pendiente, más aún, en estas situaciones.
Si necesitas ayuda profesional para bajar tus niveles de ansiedad, puedes contactar con nosotros. Tenemos a algunos de los mejores especialistas en ansiedad de Sevilla.
